Humberto Hernández, de 31 años, fue atacado esta semana mientras conducía para Uber. Su pasajero murió. Hernández dice que sólo había empezado a conducir para la empresa de transporte compartido hace unas semanas. | Alex Wroblewski/Para el Sun-Times
Humberto Hernández era conductor de Uber cuando recibió una solicitud de viaje en Englewood a primera hora del miércoles.
Pero lo que se suponía que iba a ser un viaje rápido pronto se convirtió en mortal. El pasajero pidió que lo recogieran y lo llevaran a un lugar antes de volver a su casa.
Hernández, de 31 años, dijo que llevó a Dontius Wilson, de 23 años, al lugar solicitado y esperó para llevarlo de vuelta a casa a eso de la 1 de la madrugada.
Dijo que cuando se acercaban a la casa de Wilson, en el bloque 600 al oeste de la 69th St., un vehículo lo chocó por detrás y alguien empezó a disparar a su vehículo. Luego dijo que otro vehículo intentó bloquearle el paso por delante, pero logró esquivarlo y aceleró para ponerse a salvo.
“No sé cómo logré escapar. Lo único que sé es que pisé el acelerador e intenté alejarme de allí como pude”, dijo Hernández. Contó que pudo escapar de los que disparaban, pero que al final se vio obligado a detenerse porque le habían disparado a las llantas. Dijo que entonces saltó del auto y corrió a esconderse en un callejón cercano mientras llamaba al 911.
Después de pedir ayuda, Hernández dijo que volvió a su coche para ayudar a Wilson, pero vio que le habían disparado y estaba inconsciente.
“Estaba cubierto de sangre y no sabía qué hacer. Sólo tuve que esperar a que llegara la policía”, declaró Hernández.
Wilson fue trasladado al Centro Médico de la Universidad de Chicago con múltiples heridas de bala, según la policía. Más tarde murió en el hospital, según la oficina del Forense del Condado de Cook.
Hernández, que empezó a trabajar el mes pasado como conductor de viajes compartidos, dijo que ya no se siente seguro y no sabe si seguirá haciendo viajes.
“Había escuchado que ocurrían cosas así, pero nunca imaginé que me pasaría a mí”, dijo Hernández. “Ahora sé que es verdad. Esta es una ciudad peligrosa”.
Hernández dijo que su auto quedó muy dañado en el tiroteo, y está teniendo problemas para obtener respuestas de Uber y del seguro de su auto sobre la ayuda financiera.
“Siento que me están dando largas. Dicen que se está investigando el reclamo, pero nadie me ofrece ninguna ayuda”, dijo Hernández.
Hasta el momento no hay nadie detenido y los detectives del Área 1 están investigando.