Walgreens cerrará cinco tiendas en Chicago el próximo mes, parte del plan de la cadena de farmacias con sede en Deerfield de cerrar 1,200 sucursales para el 2027.
En octubre, la compañía anunció que le dará prioridad al cierre de las tiendas de bajo rendimiento de su propiedad o las sucursales donde los contratos de arrendamiento están por vencer. La semana pasada, Walgreens dijo que cerró 70 sucursales en su primer trimestre, ya que informó ganancias trimestrales mejores de lo esperado. Planea cerrar 500 tiendas durante su año fiscal, mismo que comenzó en septiembre.
Un portavoz de Walgreens dijo el miércoles en una declaración enviada por correo electrónico: “Nuestro negocio de farmacia minorista es fundamental para nuestra futura estrategia comercial. Sin embargo, el aumento de las presiones regulatorias y de reembolso está afectando nuestra capacidad de cubrir los costos asociados con el alquiler, el personal y las necesidades de suministros”.
Las sucursales de Chicago tienen programado cerrar del 17 al 27 de febrero. Entre ellas están las ubicadas en:
- 4005 W. 26th St. en La Villita
- 9148 S. Commercial Ave. en South Chicago
- 7111 S. Western Ave. en West Englewood
- 3405 S. King Dr. en Bronzeville
- 7109 S. Jeffery Blvd. en South Shore
Walgreens destacó que tiene la intención de trasladar a los trabajadores de las tiendas cerradas de Chicago a otras ubicaciones.
“Nunca es una decisión fácil cerrar una tienda. Sabemos que nuestras tiendas son importantes para las comunidades a las que servimos y, por lo tanto, hacemos todo lo posible para mejorar el rendimiento de la tienda. Cuando los cierres sean necesarios, como los de Chicago, trabajaremos en asociación con las partes interesadas de la comunidad para minimizar las interrupciones a los clientes”, destacó la compañía.
El concejal del distrito 4, Lamont Robinson, dijo que cerrar la tienda en 3405 S. King Drive “será devastador para la comunidad de Bronzeville, particularmente para nuestros adultos mayores que dependen de ella como farmacia. Me entristece que Walgreens haya decidido cerrar esta tienda después de más de 50 años”.
La gente también depende de la tienda para obtener alimentos, agregó.
“Tenemos que encontrar una manera de dejar de lado las ganancias e invertir en las comunidades del sur y el oeste”, destacó Robinson. “Cuando Walgreens tenga tiendas en toda la ciudad, deberían poder mantener tiendas en comunidades predominantemente afroamericanas en los lados sur y oeste. Eso debería ser un buen negocio”.
Robinson dijo: “Estamos viendo esto con las tiendas de comestibles y las cadenas nacionales, no solo en Chicago, sino en todo el país, cerrando tiendas en comunidades predominantemente afroamericanas. Es necesario hacer algo al respecto. La gente debería ser prioridad antes que las ganancias”.
El concejal Peter Chico (10º), cuyo distrito incluye el centro de South Chicago, dijo que el cierre es “decepcionante y preocupante al mismo tiempo. Obviamente, estoy decepcionado, especialmente por las personas mayores de la comunidad de South Chicago que dependen de Walgreens para obtener sus recetas”.
Hay dos Walgreens todavía abiertas en su distrito, pero varios residentes han dicho que están “heridos y frustrados, al igual que yo”, compartió Chico.
Dijo que el cierre de las tiendas de Walgreens en los lados sur y oeste de Chicago “habla de las desventajas generales que tenemos. No deberíamos tener que luchar por los recursos y las necesidades básicas y para vivir la vida. Cuando se elimina una farmacia de una comunidad, eso tiene grandes repercusiones. Ahora vamos a tener que trabajar juntos como comunidad para ver hacia dónde vamos a partir de aquí”.
Las farmacias alguna vez ocuparon espacios minoritarios privilegiados en todo Estados Unidos, pero ahora están en dificultades.
Han sido golpeadas por la reducción de los reembolsos de medicamentos, el robo persistente, el aumento de los costos y los consumidores que se han pasado a los minoristas en línea o a competidores con mejores precios.
El rival de Walgreens, CVS Health, concluyó un plan de tres años para cerrar 900 tiendas, y Rite Aid salió de la bancarrota en septiembre, reduciéndose a alrededor de 1,300 locales.
En octubre, el director ejecutivo de Walgreens, Tim Wentworth, dijo que la mayoría de sus tiendas, alrededor de 6,000, son rentables y proporcionan a la empresa una base sobre la cual construir. Administra alrededor de 8,500 locales en los Estados Unidos y Puerto Rico, así como unos pocos miles de tiendas en Europa y Asia.
Wentworth dijo que las tiendas Walgreens restantes ayudarán a la empresa a responder más rápidamente a los cambios en el comportamiento y los patrones de compra de los consumidores. La empresa también está revisando nuevamente lo que vende y planea ofrecer más productos de la marca Walgreens.
Más del 29% de las casi 89,000 farmacias minoristas estadounidenses que funcionaron entre 2010 y 2020 cerraron en 2021, dijeron los investigadores en un estudio publicado en diciembre en Health Affairs. Eso equivale a más de 26,000 tiendas. Los barrios negros y latinos fueron los más vulnerables a los cierres de farmacias minoristas, que pueden ayudar a las opciones de atención médica ya limitadas en esas comunidades.
Los residentes de vecindarios que son mayoritariamente negros y latinos tienen menos farmacias por cada individuo que las personas que viven en vecindarios mayoritariamente blancos, según un análisis de AP. Es consistente con investigaciones anteriores que documentan dónde es más probable que se concentren los “desiertos urbanos de farmacias”.
Con información de AP
Traducido por Gisela Orozco para La Voz Chicago