Silvia Pinal, la gigante del cine mexicano, falleció el jueves pasado a los 93 años.
“La Secretaría de Cultura del Gobierno de México lamenta la pérdida de la primera actriz Silvia Pinal. Con una carrera que abarcó más de [siete] décadas, protagonizó más de 60 películas y producciones teatrales. Su legado sigue siendo un pilar fundamental del cine, el teatro y la televisión en México. Descanse en paz”, escribió el Ministerio de Cultura de México en una publicación en X el jueves anunciando la muerte de la actriz.
Su cuenta de Instagram también publicó un homenaje, una foto de Pinal con su característico cabello rubio junto con las palabras: “Adiós a la última gran diva del cine mexicano: la señora Silvia Pinal”.
Nacida en Guaymas, Sonora, México en 1931, Pinal se convirtió en una actriz adorada de la pantalla durante la Época de Oro del Cine de México.
Pinal, actriz de cine y teatro, causó sensación en el cine en 1949 con “La mujer que yo perdí”, en la que actuó junto al legendario cantante de rancheras y protagonista Pedro Infante. Más tarde actuaría junto a muchas de las estrellas masculinas más importantes de México, entre ellas Cantinflas y Germán Valdés “Tin-Tán”.
A medida que su estatus de estrella comenzó a cruzar fronteras, Pinal consolidó su reconocimiento internacional con una trilogía de películas del cineasta surrealista Luis Buñuel como “Viridiana” (1961), “El ángel exterminador” (1962) y “Simón del desierto” (1965).
“Hasta el día de hoy no sé de qué trata la película”, dijo Pinal sobre “El ángel exterminador” en una entrevista, “Jugaba con tu mente y las ideas que te habías formado”.
Pinal, que ya era una parte indiscutible del tejido cultural del país, dio el salto a la política más tarde en su vida, tras casarse con el gobernador del estado de Tlaxcala, Tulio Hernández. Pasó a ocupar varios cargos y a dirigir un importante sindicato de actores mexicanos.
Alcanzando la fama en una época en la que se esperaba que las estrellas de Hollywood fueran una opción única para actuar, cantar y bailar, Pinal era una amenaza cuádruple, añadiendo a esa lista un sólido conjunto de dotes cómicos.
“Mi más sentido pésame a la Familia Pinal, por el fallecimiento de la gran actriz, doña Silvia Pinal, la monarca”, escribió la cantautora mexicana Ana Gabriel en X, “Deseo de todo corazón, querida amiga, que tu alma vuele alto y que llegues pronto, al Todopoderoso, donde serás recibida como lo que eras, Grande entre los Grandes”.
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Traducido por La Voz Chicago