¿Puede Trump separar a esta pareja indocumentada de Chicago de su bebé? Estos padres se preparan para lo peor

Después de un largo día frente a sus estudiantes, Damariz Posadas tuvo que hacer llamadas para conseguirle a su bebé de siete meses sus pasaportes de Estados Unidos y México. Antes de que se diera cuenta, ya había pasado la hora de dormir.

El niño se le pegó para que le diera leche. Damariz lo acarició suavemente. Se quedó dormido en cuestión de minutos. La lactancia materna “proporciona esa experiencia de unión, por la que estoy muy agradecida”, dijo.

“Esperamos hacer eso hasta que tenga al menos dos años”.

Pero, como todo lo demás en su vida en este momento, la capacidad de Damariz para realizar ese plan es incierta.

Damariz Posadas, 27, breastfeeds her 7-month-old son.| Ashlee Rezin/Sun-Times

Damariz Posadas amamanta a su hijo de 7 meses.

Ashlee Rezin/Sun-Times

Damariz y su esposo Maethee, quien pidió que no se revelara su apellido, llegaron a los Estados Unidos a los 3 años de edad. Ella vino de México; él vino de Tailandia. Crecieron en Chicago sin estatus legal en el país.

Se conocieron en décimo grado en Lane Tech, una escuela secundaria del lado norte, y comenzaron a salir el año siguiente.

Ambos calificaron para la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), programa establecido por la administración del presidente Barack Obama en 2012. Ha protegido a medio millón de jóvenes de la deportación.

Más de una década después, Damariz y Maethee tienen títulos de maestría y buenos trabajos.

Ella es maestra de ética y espiritualidad y ministra del campus en una escuela secundaria católica en los suburbios del norte. Él es desarrollador de software y trabaja desde casa cuidando al bebé. La pareja alquila un apartamento de dos habitaciones en Rogers Park. Tienen conejos de mascota y dos autos.

Siempre se han comunicado entre sí en inglés, pero desde el nacimiento de su hijo en mayo pasado, los sonidos de otros dos idiomas han llenado su apartamento. Damariz le habla en español al bebé; Maethee le habla en tailandés.

DACA abre caminos hacia la educación y el empleo legal, pero no hacia la ciudadanía. DACA también ayuda al gobierno federal a controlar a los inscritos. Y el futuro del programa siempre está en el aire. Durante su primer mandato presidencial, Donald Trump intentó ponerle fin.

Ahora está de regreso.

“El primer día, terminaré con todas las políticas de fronteras abiertas de la administración Biden y comenzaremos la mayor operación de deportación interna en la historia de Estados Unidos”, dijo Trump en un discurso en febrero pasado, repitiendo una promesa de campaña frecuente.

Esto tiene a Damariz y Maethee preocupados por su familia y por la posibilidad de que las separen de su hijo, que tiene ciudadanía estadounidense porque nació en el país.

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“Ese sería el peor escenario para nosotros”, comentó Damariz. “¿Quién lo va a alimentar?

¿Les importaría siquiera que sea un bebé amamantado? ¿Saben que le gusta que le den palmaditas para dormir? ¿Saben que su comida favorita en este momento es la sopita? ¿Saben que le gusta apretar sus deditos alrededor de tu dedo cuando le haces cosquillas?”.

Damariz Posadas, 27, hugs her 7-month-old son, nicknamed “Boon,” at the family’s North Side home, Saturday, Jan. 11, 2025. Posadas and her husband Maethee, 27, who asked that his last name not be published, both DACA recipients, are preparing for possible deportations during Donald Trump’s second presidential term. | Ashlee Rezin/Sun-Times

Damariz Posadas abraza a su hijo de 7 meses, apodado “Boon”, en la casa de la familia en el lado norte.

Ashlee Rezin/Sun-Times

La incertidumbre de Damariz ha existido durante toda su vida.

Cuando tenía 3 años de edad, su primer recuerdo fue una caminata nocturna en el desierto de Sonora con su madre y un grupo de extraños, rumbo al norte desde México hacia Arizona.

“Recuerdo una oscuridad intensa, completamente negra por todos lados”, contó Damariz. “Y hacía frío. Hacía mucho frío”.

Damariz dijo que debió haber estado haciendo ruido, porque uno de los extraños, preocupado por llamar la atención de las autoridades estadounidenses, confrontó a su madre.

“Tienes que callarla”, recordó Damariz que le dijo. “No puedes dejar que grite”.

“Lo siguiente que recuerdo es que él se acercaba a mí con cinta adhesiva”, dijo Damariz. “Estaban a punto de taparme la boca con cinta adhesiva”.

Después de varios intentos fallidos de cruzar la frontera, los agentes de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos en dos puestos de control aceptaron dinero en efectivo del grupo, dijo Damariz.

Ella y su madre encontraron el camino a Chicago.

Damariz creció en La Villita, un vecindario predominantemente mexicano.

Cuando tenía 17 años de edad, contó que los agentes federales de inmigración llegaron a la casa de su familia.

Damariz dijo que uno de los agentes le apuntó con un arma a la cabeza antes de llevarse a su padrastro y deportarlo a su natal El Salvador.

Su padrastro viajó de regreso a través de México y llegó a la frontera con Estados Unidos, dijo.

“Su teléfono celular seguía recibiendo llamadas”, recordó Damariz. “Así que llamamos a ese teléfono celular todos los días y, en un momento dado, dejó de sonar. Y esa fue la última vez que supe de él”.

“Hasta el día de hoy, no sabemos exactamente qué sucedió”, dijo Damariz entre lágrimas. “Podemos asumir que murió al cruzar la frontera”.

Los temores que atormentan a Damariz y Maethee también afectan a muchos padres inmigrantes en Chicago.

La promesa de Trump de una “deportación doméstica” masiva fue un pilar de su campaña.

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Su primer gobierno separó a miles de niños de sus padres en la frontera mexicana y los transfirió a refugios en todo Estados Unidos.

Se estima que 4.4 millones de niños nacidos en Estados Unidos viven con un padre inmigrante indocumentado.

Conoce tus derechos en caso de una redada

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Antes de cualquier posible encuentro con agentes de inmigración, debes:

  • Reunir todos tus documentos de identificación importantes
  • Dejar que una persona de confianza sepa dónde encontrar tus documentos
  • Hablar con la familia sobre qué hacer si algún familiar es detenido por ICE
  • Dar a la escuela de tus hijos una lista de adultos de confianza que los puedan recoger
  • Consultar o tener a la mano la información de un abogado de inmigración

¿Qué hacer si ICE llega a tu hogar?

  • No abras la puerta sin una orden de un juez con tu nombre
  • Guarda silencio, tienes derecho a no hablar
  • No firmes ningún documento
  • Llama a un abogado antes de contestar cualquier pregunta o busca ayuda legal llamando al (312) 660-1370 o a (855) 435-7693

¿Qué hacer si ICE viene a tu trabajo?

  • Manten la calma
  • No proporciones documentos falsos ni los lleves al lugar de trabajo
  • No intentes interferir con un oficial de ICE
  • Di que quieres hablar con un abogado
  • No firmes ningún documento sin un abogado
  • Manten números importantes contigo
  • Si te detienen y tienes niños, comunícaselo a los agentes de inmigración

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La profesora de derecho de la Universidad de Illinois Lauren R. Aronson dijo que los temores de separación de niños en el interior del país no son vanos. Dijo que la razón para separar a los niños pequeños de sus padres podría ser que “el bebé tiene derecho a vivir aquí, dado que es ciudadano de este país”.

Aronson dijo que no espera que las autoridades de inmigración arrebaten a los niños a los beneficiarios de DACA, “pero no los descarto, dada la historia”.

El destino de DACA en sí es incierto. Cuando Trump intentó poner fin al programa durante su primer mandato, una mayoría de un voto en la Corte Suprema de Estados Unidos lo mantuvo en su lugar. Ahora, la corte es más conservadora.

“Lo último que escuché decir a Trump, que básicamente es que va a encontrar una manera de que la gente de DACA esté de acuerdo, no necesariamente confío en eso”, destacó Aronson.

Los funcionarios mexicanos instan a los padres inmigrantes a obtener la doble ciudadanía para sus hijos nacidos en los Estados Unidos, para asegurarse de que, si los padres son deportados, los niños no terminen perdidos en el sistema de bienestar infantil de Estados Unidos.

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Damariz y Maethee dicen que no quieren correr ningún riesgo.

El bebé se queda con ellos las 24 horas del día. Nunca hay niñeras ni cuidado de niños.

La pareja también está analizando todos los escenarios posibles en los que los agentes de inmigración detendrían a uno o a ambos, y a quién primero.

Sobre todo, están trabajando en una lista de tareas por hacer.

El plan, en última instancia, es establecerse en Tailandia. Este mes, obtuvieron la ciudadanía tailandesa para el bebé y han solicitado un pasaporte tailandés.

Pero Damariz sería deportada a México. Quieren que el bebé se quede con ella, por lo que también necesitará ciudadanía mexicana y un pasaporte de ese país.

Damariz necesitará una visa tailandesa. Y la familia está haciendo planes de contingencia para sus finanzas, teléfonos, autos, mascotas, alquiler de apartamento, muebles, almacenamiento, envíos y más.

Los detalles son abrumadores y no solo toman tiempo. Los factores estresantes emocionales, logísticos y físicos conllevan riesgos. Nayeli Chávez-Dueñas, maestra de psicología en la Chicago School, dijo que la incertidumbre de toda la vida de la pareja podría tener consecuencias para la salud.

“El peor tipo de estrés se experimenta de forma crónica, lo que significa que simplemente no desaparece”, destacó Chávez-Dueñas. “Ese tipo de estrés se ha relacionado no sólo con problemas de salud mental, sino también con problemas físicos como enfermedades cardiovasculares y diabetes tipo 2”.

Cada miembro de la familia está sintiendo la tensión de este período. Damariz dice que la ansiedad tiende a apoderarse de ella en mitad de la noche, cuando se despierta para amamantar al bebé.

“Los pensamientos corren cíclicamente en mi cabeza y luego termino quedándome despierta durante horas”, dijo.

Los mismos pensamientos una y otra vez.

“¿Qué pasa si lo separana de nosotros? ¿Qué vamos a hacer en ese momento?”, preguntó. “¿Cómo lo encontramos de nuevo en el sistema? ¿Cuáles son nuestros derechos legales para asegurarnos de que se quede con nosotros? ¿Qué pasa si me quedo varada en México y cómo nos aseguraremos de que lo alimenten? ¿Qué pasa si no acepta la [leche de] fórmula?”

Y si la separación dura: “¿Se acordará de mí? Tiene 7 meses. Si me voy durante un mes, porque estamos tratando de llevarme a Tailandia de alguna manera y es algo difícil de hacer, cuando lo vuelva a ver, ¿seguirá abrazándome? ¿Seguirá sonriendo cuando me vea?”

“No quiero pensar en estas cosas”, dijo Damariz, “pero lo hago porque es una posibilidad”.

Chip Mitchell reporta para WBEZ Chicago sobre vigilancia, seguridad pública y salud pública. Síguelo en @chipmitchell1 en Bluesky y Twitter. Contáctalo en cmitchell@wbez.org

Damariz Posadas, 27, plays with her 7-month-old son, nicknamed “Boon,” at the family’s North Side home, Saturday, Jan. 11, 2025. Posadas and her husband Maethee, 27, who asked that his last name not be published, both DACA recipients, are preparing for possible deportations during Donald Trump’s second presidential term. | Ashlee Rezin/Sun-Times

Damariz Posadas sostiene la mano de su hijo de 7 meses, apodado “Boon”.

Ashlee Rezin/Sun-Times

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