Lila Downs le cantará a la vida y a la muerte

Por medio de su música, Lila Downs le ha regalado a sus seguidores momentos para sanar y curar el alma y también ha hecho de su voz y arte su plataforma para hablar de temas importantes.

Pero ahora, su regreso a Chicago este 27 de octubre será especial y personal.

No sólo porque el Medio Oeste es “su casa, su hogar” sino porque el concierto en Symphony Center será para celebrar el Día de Muertos, fecha de gran significado en la cultura mexicana y porque personalmente la cantautora está aún viviendo un duelo que requiere que cante para aliviar sus propios dolores.

“En esta gira por Estados Unidos he cantando canciones de esas que te jalan a la tierra como ‘Penas en el alma’ porque era necesario para mí tener esa tristeza en el escenario”, contó Lila Downs en entrevista a La Voz Chicago.

Downs está viviendo el duelo y replantearse la vida sin su compañero y productor musical Paul Cohen. “Voy a cumplir dos años de haberlo perdido”, dijo Lila Downs sobre el deceso de Cohen ocurrido el 7 de diciembre de 2022 y que marcó el final de su vida juntos de más de tres décadas.

Paul Cohen era su esposo, productor musical y padre de sus hijos por lo que para Downs ha sido difícil su partida a nivel personal y profesional.

Lila Downs: Concierto de Día de Muertos
Cuándo: 27 de octubre, 7 p.m.

Dónde: Symphony Center, 220 S. Michigan Ave.

Admisión: $45+.

Información: cso.org

“Ha sido un reto volver a la música sin él”, confesó Downs. “Al principio,todo fue como mecánicamente. Ahora es cómo planeo mi año, mis fechas, estar decidiendo en cosas que antes no lo hacía y ha sido un golpe de cierta forma pero tengo que tomar las riendas”.

Y no es porque Downs no tuviera independencia. Su relación era de compañeros, de pareja. Ella hacía unas cosas, él se encargaba de otras. “A veces las mujeres nos relajamos mucho y dependemos del varón. Es algo que noté, yo lo hice y lo veo en otras compañeras”.

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No ha sido fácil. Cohen creyó en el trabajo de Downs “desde el principio hasta el final”. Pero, como destacó la intérprete, estuvieron conviviendo con la muerte una década antes del deceso de su marido cuando le diagnosticaron una enfermedad cardíaca.

“Todo ese tiempo cargamos con la muerte”, reveló. “Es un estado interesante porque siempre es estar esperando, tenerlo más presente y es una experiencia diferente”.

Eso tuvo un efecto positivo, de alguna manera, dijo. “Estábamos más contentos de vivir la vida, de disfrutar los momentos y pensar en que viene la muerte, pero también no dejar que eso controle tu pensamiento y sentir. Todos tenemos que irnos en algún momento. Es un tema complejo y bello a la vez”, describió.

Aún así a sabiendas de lo único que como humanos tenemos seguro en la vida, nadie se prepara para el desenlace. A Downs le parece que se trata de perderle el miedo a la muerte y vivir, pero no se puede evitar pasar por el duelo y el dolor. Eso se tiene que vivir.

Y en su caso ese sentir está presente y latente en su más reciente disco “La Sánchez” (2023) su doceavo material de estudio y en el que rinde tributo a su madre, la cantante Anita Sánchez, perteneciente a los pueblos originarios de la región mixteca oaxaqueña y donde Downs hace eco del matriarcado mexicano ante su nueva forma de enfrentar la vida.

“A todas nos toca tomar las riendas de nuestra vida y de eso se trata el disco más reacciones a la partida de Paul [Cohen, su esposo], fui cambiando las letras para que tuvieran que ver con la pena de perder la vida”, dijo Lila Downs sobre su disco “La Sánchez”.

Marcela Taboada

“En México y en la sociedad tradicional, todavía se sufre como viuda”, resaltó Downs contando que este nuevo estado civil y emocional le reveló verdades que se manifestaron cuando invitó a varias personas a cantar con ella.

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“Todos huyeron y esa fue una señal que todavía existe el mismo pensamiento de hacer a un lado a la viuda. Me acuerdo en mi pueblo que cuando mi mamá perdió a mi papá — el pintor estadounidense de origen escocés Allen Downs— la gente dejó de hablarnos porque ya no estaba el hombre de la familia”, contó.

Pero que le pasara en pleno 2022 resultó algo increíble.

“Hasta algunas personas de mi equipo de trabajo se aceleraron, [pensando que] ya sin el ‘amo’, todo se iba a ir a la fregada (risas). Eso es difícil vivirlo porque además estás vulnerable y hay quienes sacan provecho, eso es de poca ma… de poco sentimiento. Sí, se aprovecharon de mí pero no me quejo, todo me hizo fuerte, me hizo darme cuenta del valor de lo que yo estoy haciendo de seguir peleando por los mensajes, por la música, por ser la líder del grupo porque es lo que ahora toca”.

Como antropóloga, a Lila Downs le ha resultado interesante ver y vivir en carne propia ese comportamiento y por otro lado, ver la fortaleza de la mujer, contar con el apoyo de su mamá, de las mujeres Sánchez, que son independientes y de la comunidad de mujeres de la mixteca que son “mujeres solas” ya sea porque enviudaron, porque el marido se fue “al norte” (Estados Unidos) o simplemente porque se fue.

“A todas nos toca tomar las riendas de nuestra vida y de eso se trata el disco más reacciones a la partida de Paul, fui cambiando las letras para que tuvieran que ver con la pena de perder la vida”, explicó.

Su cambio de vida también fue el cambio de residencia. Downs regresó a vivir a su pueblo en Oaxaca luego de años de vivir en Estados Unidos. Está conectada con la raíz materna, se siente agradecida de tener a su madre, que ya tiene 86 años y que “es una mujer súper divertida y fuerte”.

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“Tiene un ranchito y vamos con mi niña de 7 años —Vanessa Cohen Downs— y mi niño de 14 —Benito Cohen Downs—; acabamos de cosechar maíz, quelites. Estamos conectados con la naturaleza. Estoy agradecida de estar en Oaxaca con mi madre, heredando sus conocimientos y en contacto con todos en el pueblo, teniendo esa cercanía”.

Parte de ese regreso es darle a sus hijos una infancia tan feliz como la que ella tuvo cuando creció en Oaxaca, donde se establecieron sus padres.

“Quiero que mis hijos tengan esas memorias y recuerdos. Cuando yo era niña, la pasaba con mi abuela porque mis papás viajaban mucho y recuerdo esas aventuras de ir a la pizca del frijol, de los elotes. Son esas memorias las que nos dan fuerza para el futuro”, resaltó.

Y por otro lado, está esa fuerza que le hace volver al escenario. Si bien su concierto en Chicago es el que marca el final de su gira por Estados Unidos, “La Sánchez” se alista para su concierto en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México el 1 de noviembre donde hará “una curación”, en referencia a uno de los temas de su más reciente disco.

“Compuse este tema y no lo he cantado mucho, pero es un tema que me cura, habla de tener que llorar, de la fuerza, de no vencerme. Es algo tan básico pero me acuerdo que cuando lo compuse, dije ‘esto no es tan poético, pero lo necesito’, tengo que darme ánimos porque nadie más me lo da. Una misma tiene que levantarse para seguir haciendo y creyendo”, enfatizó.

En este concierto, Lila Downs celebrará la vida, la música mexicana y sanará su alma.

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